Los habitantes de la localidad crearon la Asamblea de Vecinos Autoconvocados. Denuncian que entre los productores que fumigan se encuentra el intendente Carlos Peiretti.

En el mapa cordobés, Canals está ubicado al sudeste, a 161 kilómetros de Villa María (por la ruta 4 hasta La Carlota y por la ruta 8 hacia Alejo Ledesma y Arias), sobre una llanura con lagunas que favorecen la ganadería y la agricultura como actividades principales. Sin embargo, sobre sus tierras prima esta segunda actividad acompañada por el uso de agroquímicos.

“La de Canals y sus 8.645 habitantes no es una situación aislada en los pueblos de Córdoba. A solo 64 kilómetros de distancia está Monte Maíz, donde un estudio realizado en 2014 por miembros de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) determinó que el cáncer era la principal causa de muerte”, recordó la periodista Consuelo Cabral para La Nueva Mañana.

Fue tras ese informe que los vecinos de Monte Maíz se organizaron y consiguieron la aprobación de una ordenanza que regula el espacio público procurando disminuir la exposición a los agrotóxicos por parte de la población, recordó la comunicadora.

Teniendo en cuenta ese antecedente, los habitantes de Canals se pusieron de pie para luchar por una ordenanza similar en su pueblo. Un grupo de médicos envió una carta a las autoridades municipales reclamando el cese de las fumigaciones, pero la respuesta del secretario de Gobierno fue que “Canals es un pueblo agrícola con glifosato y que no va a cambiar”.

El pasado 27 de noviembre, Medardo Avila Vázquez, coordinador de la Red de Médicos de Pueblos Fumigados y miembro de la Red Universitaria de Ambiente y Salud, estuvo presente en la asamblea que llevaron a cabo los vecinos de Canals y contó que la situación es complicada para los vecinos porque el actual y dos veces intendente, Carlos Peiretti, “no sólo tiene campos, sino que es uno de los que fumiga y contamina el pueblo con sus mosquitos y enormes depósitos de donde entran y salen miles de bidones de agrotóxicos”.

“Además, la actual presidenta del Concejo Deliberante, Adriana Conte, también es una actora directa en el negocio de la agricultura con venenos”, comentó Avila Vázquez, para agregar a la lista de fumigadores a “Fernando Wingeter, el anterior intendente que duró ocho años en funciones, y Mencho Ferreyra, actual presidente del Club Atlético Libertad”.

La mayoría de los vecinos dijeron que sus familiares y vecinos “padecen y mueren de cáncer y viven entre depósitos de agrotóxicos y máquinas aplicadoras mosquitos que circulan como hormigas gigantescas por todos los sectores del pueblo”.

Presentes

Durante el Encuentro Socioambiental por la Salud y por la Vida, Avila Vázquez, el médico Adolfo Estrella (oriundo de Canals), el ingeniero agrónomo Claudio Demo (de la Universidad Nacional de Río Cuarto), el veterinario Marcelo Frías, de la estancia Las Dos Hermanas, y la abogada de Fundeps, María Pérez Alsina, hablaron hasta llegada la madrugada.

“El problema de esta comunidad es la salud de sus miembros, en años de gran prosperidad económica no dejan de aparecer nuevos casos de cáncer, que parece ser la principal causa de muerte, como ya lo manifestó el Registro Provincial de Tumores para todo este departamento en su informe del año 2014”, explicó Avila Vázquez a LNM.

La gran mayoría de los vecinos que tomaron la palabra dijeron que sus familiares y vecinos “padecen y mueren de cáncer y viven entre depósitos de agrotóxicos y máquinas aplicadoras mosquitos que circulan como hormigas gigantescas por todos los sectores del pueblo”.

El médico de la Red de Pueblos Fumigados contó que “los dramas familiares que se relataron conmovían a los presentes, niños enfermos gravemente, varones jóvenes con cánceres comunes en ancianos, cánceres de páncreas, mama, colon y pulmón por doquier”.

Fuentes:

El colectivo Todos por Nuestros Arroyos (TxNA) emitió un comunicado celebrando “la resolución de la jueza Graciela Cerini por la cual desestimó la demanda iniciada por Potrerillo de Larreta contra la Provincia de Córdoba, demanda que le ha permitido al country alambrar al arroyo Los Paredones, impidiendo el acceso a los vecinos al espacio público”.

Tras el fallo de la jueza de Segunda Nominación de Alta Gracia, Graciela Cerini, quien emplazó a que en 90 días se retire el alambrado, en tanto que ordenó a que la Provincia y el Municipio “determinen el uso del espacio público, sin invadir terrenos privados”, desde el colectivo social Todos Por Nuestros Arroyos se mostraron “muy contentos” y celebraron la resolución”.

Desde la organización, a través de un comunicado, expresaron que “este fallo supone un hito en la historia de TXNA y de los vecinos de Alta Gracia”. Asimismo, “seguimos denunciando que existen otros casos de privados que se han sentido con el privilegio y el poder de adueñarse de lo que es de todos”, enfatizaron al tiempo que enumeraron los cursos de agua existentes cuyo acceso al público está resentido: el arroyo Caocamillín y el arroyo Estancia Vieja.

En la misma dirección, desde el colectivo insistieron en que “nada se habría logrado sin la acción social, sin la organización de los vecinos que presionaron al estado en todos sus niveles para tomar cartas en el asunto”.

Comunicado

Desde el colectivo social TXNA estamos muy contentos y celebramos la resolución de la jueza Graciela Cerini por la cual desestimó la demanda iniciada por Potrerillo de Larreta contra la Provincia de Córdoba, demanda que le ha permitido al country alambrar al arroyo Los Paredones, impidiendo el acceso a los vecinos al espacio público.

Este fallo supone un hito en la historia de TXNA y de los vecinos de Alta Gracia, aún así, entendemos que esto es sólo un paso más en nuestra lucha. Seguimos denunciando que existen otros casos de privados que se han sentido con el privilegio y el poder de adueñarse de lo que es de todos.

El arroyo Caocamillín, donde se encuentra emplazado el barrio Liniers, lleva años alambrado por el barrio privado La Hornilla. En su momento, año 2009, el proyecto de La Hornilla fue aprobado por el Concejo Deliberante de la ciudad de Alta Gracia mediante una ordenanza donde se indicaba que la Municipalidad aceptaba a manera de “donación” el arroyo, lo cual supone un absurdo jurídico en todo sentido ¿Dónde se ha visto que el Estado acepte que un privado le “done” espacio público?

Denunciamos asimismo que el arroyo Estancia Vieja se encuentra alambrado en distintos sectores de su cauce por varios privados. TXNA realizó un informe donde se detalla cada lugar con coordenadas de GPS y fotografías, informe que luego fue entregado a la Municipalidad de Alta Gracia. La respuesta que obtuvimos del gobierno de la ciudad fue, de nuevo, nula.

Agradecemos a la fundación Fundeps por participar como amicus curiae en la demanda entre Potrerillo y la Provincia y entendemos que nada se habría logrado sin la acción social, sin la organización de los vecinos que presionaron al estado en todos sus niveles para tomar cartas en el asunto.

La lucha continúa.
¡Queremos caminar libremente por los arroyos!
Colectivo Todos por Nuestros Arroyos

Fuente: Diario Tortuga

El Ministerio de Ciencia y Tecnología de la provincia informa que mañana miércoles 29 de noviembre se llevará a cabo la Jornada de Género y Tecnología.

Algunos de los temas a debatir serán: Oportunidades laborales para mujeres en el mundo de la tecnología; Mujer y tecnología en la arena política y Desafíos de las mujeres en el mundo laboral.

La dependencia gubernamental provincial estará representada por la participación de la secretaria de Gestión en Ciencia y Tecnología, Esther Galina, quien integrará el panel sobre “Brecha digital, género y tecnología”, junto a Mica Mantegna, (Geeky Legal); Belén Bonello (Fundación Sadosky); Lila Pagola, (Universidad de Villa María) y Celeste Torresi (Santex).

La brecha digital de género es la que se refiere usualmente a la desigualdad en el acceso y uso de las tecnologías de la in­formación y comunicación (TICs) por parte de niñas y mujeres.

Según estudios de 2016 de la Unión Internacional de Teleco­municaciones (ITU), está brecha se viene agrandando a nivel global. Aunque no se trata sólo de inequidades en el acceso a las TICs, se conoce que hay 200 millones menos de mujeres conectadas que hombres.

La actividad se desarrollará de 9 a 16 en el aula 17 de la Facultad de Matemática, Astronomía, Física y Computación (FAMAF) de la Universidad Nacional de Córdoba (Av. Medina Allende s/n , Ciudad Universitaria, Córdoba).

La Jornada es organizada por Fundación para el Desarrollo de Políticas Sustentables (FUNDEPS), WIDE (Women in the DIgital Ecosystem) y el Proyecto Mucho con Poco de Asuntos del Sur.

Los cupos son limitados, el almuerzo es incluido y las inscripciones se realizan en https://goo.gl/KvtqkK

Fuente: La Radio 102.9

En el marco del Día de la Alimentación, que se celebró el lunes último, la Fundación Interamericana del Corazón (FIC Argentina) enfatizó sobre la necesidad de avanzar con una regulación del etiquetado de alimentos que garantice el acceso a información clara y precisa para todos los consumidores. La información nutricional en los envases permite conocer cuán saludables o no son los alimentos y así favorece la selección de aquellos con mejor calidad nutricional.­

Sin embargo, la normativa vigente que regula esta información en nuestro país no es efectiva para promover la elección de alimentos saludables. Uno de los puntos más complejos es que no obliga a las empresas a declarar el contenido de azúcar de cada producto ni establece topes máximos en su contenido, señalaron desde FIC Argentina.­

El azúcar es un nutriente crítico que, consumido en exceso, promueve el desarrollo de la obesidad y otras enfermedades no transmisibles, como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.­

FIC Argentina realizó un análisis sobre 301 envases de cereales, galletitas dulces y postres que reflejó que en el 70% (210) de estos productos el azúcar es el ingrediente de mayor proporción de la lista de ingredientes. ­

Estos productos fueron analizados previamente en otra investigación, realizada por FIC Argentina, FUNDEPS y la Universidad Católica de Santa Fe, que buscó conocer las técnicas de marketing utilizadas en los envases. En este sentido, se conoció que los mensajes de nutrición («Fuente de vitaminas y minerales» o «50% de calcio diario recomendado») y los personajes animados o famosos, son los recursos más utilizados por las empresas alimenticias.­

DESINFORMADOS­

«Actualmente los consumidores no saben la cantidad de azúcar que contiene un alimento y, en paralelo, reciben información engañosa y confusa que las empresas incorporan para que sus productos sean identificados como saludables aunque no lo sean. Es decir, tanto el derecho a la información como a una alimentación adecuada se ven vulnerados», señaló Lorena Allemandi, directora del área de políticas de alimentación saludable de FIC Argentina. Y agregó: «Es necesario promover un sistema de advertencias nutricionales, como el implementado en Chile, que alerta a los consumidores sobre el contenido excesivo de nutrientes críticos y, a su vez, les garantiza su derecho a obtener información clara y veraz sobre lo que están consumiendo».­

La evidencia indica que el sistema de advertencias nutricionales es el más efectivo para generar decisiones informadas en los consumidores ya que, a diferencia de otros sistemas, no requiere una interpretación compleja de la información y permite identificar rápidamente cuáles son los productos menos saludables.­

Este sistema incorpora un sello en el envase que muestra si hay exceso de contenido de azúcar, sodio o grasas saturadas y, de esta manera, contribuye a disminuir el consumo de los productos procesados con baja calidad nutricional. «De una forma muy sencilla, este sistema permite que los consumidores identifiquen los productos que presentan exceso en algún nutriente crítico y una de sus ventajas es que no requiere un conocimiento previo sobre información nutricional para su comprensión. Argentina debe avanzar con un sistema de advertencias nutricionales que esté focalizado especialmente en la población más vulnerable ya que son los más afectados por la obesidad y el sobrepeso», concluyó Lorena Allemandi.

Fuente: La Prensa

El 87% de los cereales de desayuno, los postres y las galletitas dulces contienen una cantidad excesiva de uno o más nutrientes críticos como sodio, azúcares libres o grasas. Así lo reflejó un análisis sobre 301 productos de estas categorías (209 galletitas dulces, 50 postres y 42 cereales de desayuno) realizado por la Federación InterAmericana del Corazón (FIC) Argentina, en colaboración con FUNDEPS y la Universidad Católica de Santa Fe.

El estudio fue realizado con el objetivo de analizar la calidad nutricional de los productos seleccionados y, en paralelo, detectar las técnicas de marketing dirigidas a niños y niñas en los envases de estos productos. En este sentido, la investigación reflejó que 4 de cada 10 envases de cereales, postres y galletitas de baja calidad nutricional utilizan mensajes de nutrición tales como “Fuente de vitaminas y mineras” o “50% de calcio diario recomendado”.

A su vez, la investigación reflejó que 3 de cada 10 de estos productos altos en sodio, grasas o azúcar presentan personajes en sus envases, tanto aquellos creados por la marca como personajes de deportistas y celebridades. También se detectó, en menor medida, la presencia de otras técnicas de marketing como la entrega de regalos, los envases coleccionables, los juegos y los mensajes de salud (“huesos fuertes”, por ejemplo).

“Los resultados del estudio evidencian que la regulación de envases en Argentina no es efectiva para la protección del derecho a la salud, a la alimentación adecuada y a la información de los consumidores. Por el contrario, la normativa vigente del etiquetado habilita a la industria de alimentos a incorporar información que confunde al consumir y técnicas que buscan atraer a los chicos al consumo de productos no saludables”, declaró Lorena Allemandi, directora del área de políticas de alimentación saludable de FIC Argentina.

Fuente: Diario Popular

Reclamamos la designación del #DefensorDelNiñoYa

A 12 años de la sanción de la Ley de Protección Integral de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes (Ley N° 26.061), aún no se ha designado el Defensor de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, figura que debía implementarse en el plazo de 90 días desde su entrada en vigencia. Las organizaciones sociales y personalidades destacadas en el campo cultural y social abajo firmantes manifestamos nuestra profunda preocupación.

A pesar del compromiso con la niñez y la adolescencia asumido por la Comisión Bicameral (integrada por Carla Carrizo, Samanta Acerenza, Mayra Mendoza, Verónica Mercado, Florencia Peñaloza, Norma Durango, Juan Manuel Abal Medina, Sigrid Kunath, Pamela Verasay y Adolfo Rodríguez Saá) la obligación legal sigue sin cumplirse. Por eso, es fundamental que avancen con el llamado a concurso para que la designación del Defensor de Niñas, Niños y Adolescentes se concrete antes de fines de este año.

Es imprescindible que la designación se dé en el marco de un procedimiento transparente que asegure que el cargo sea cubierto no sólo por una persona idónea en el tema, con trayectoria en la defensa de derechos de los chicos y chicas sino que, fundamentalmente, ofrezca garantía de un actuar autónomo e independiente con respecto a los organismos públicos con responsabilidad en el diseño, gestión e implementación de las políticas de infancia y adolescencia en nuestro país.

Niñas, niños y adolescentes tienen derecho a que su protección sea más que un discurso.

Nora Cortiñas – Adolfo Pérez Esquivel – Osvaldo Bayer – Juan Carr – Aldeas Infantiles – Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) – Asociación por los Derechos civiles (ADC) – Red Solidaria – Colectivo de Derechos de Infancia y Adolescencia – Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) – Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC) – Servicio de Paz y Justicia (SERPAJ) – Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA) – Fundación Huésped – ATE Nacional – Consejo Ejecutivo Nacional de CTA Autonoma – CTA Berazategui – CTA Moreno – CTA Solano – Infancia en Deuda – DNI – Asociación Síndrome de Down de la República Argentina (ASDRA) – AECheLaR-La Rioja– Fundación para el Desarrollo de las Políticas Sustentables (FUNDEPS) – Fundación para Estudio e Investigación de la Mujer (FEIM) – Fundación Sur Argentina – Fundación Voz – Grupo Artículo 24 por la Educación Inclusiva – Haciendo Camino – Casasidn – Asamblea por los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes de General Pico–La Pampa – Asociación Civil Emprendedores Chepes–La Rioja– Asociación Civil para todos y todas de Gral. Villegas – Asociación Civil Una Mano que Ayuda – Cáritas Obispado de Quilmes – Cátedra abierta de estudios americanistas – Colectivo Cordobés por los Derechos de Niñas, Niños y Jóvenes – CECOPAL – La Minga – SERVIPROH – Programa del Sol – SEHAS –Fundación Che Pibe – Fundación Emmanuel – Colectivo cordobés por los derechos de niños niñas y jóvenes – Asociación por los Derechos de la Infancia (ADI)– Foro por la Niñez La Pampa – Fundación Ayuda a la Niñez y Juventud Che Pibe – PRADE –Práctica Alternativa del Derecho-Santiago del Estero – ANDHES (Abogados y Abogadas del Noroeste Argentino en Derechos Humanos y Estudios Sociales) Tucumán/Jujuy – Casa Osvaldo Bayer – Centro comunitario Infantil La Merced de San Miguel– Centro Cultural Villa El Libertador– Centro de desarrollo integral Pancita Feliz– Colectivo Cultural de Ing. Maschwitz – Conciencia comunitaria de Cañuelas– Consejo local de Niñez de Mar del Plata – Consejo Local de San Miguel – Cooperativa La Comunitaria – Coordinadora Popular Barrio Ludueña de Rosario – Crecer con Derechos de Vicente López – El Vallecito de la Guadalupe, Asociación Civil – El Granero de los Sueños –Escuela de Arte Comunitaria Cruzavias – Foro Hídrico Lomas – Foro Niñez de Vicente López – Foro pampeano por los derechos de los/as niñ@ – Foro por los Derechos de Berisso – Foro por los Derechos de la Niñez, Adolescencia y Juventud de la Provincia de Buenos Aires – Frente Barrial Solano– Fundación El Recodo del Sol – Fundación Proyectando Esperanza – Fundación Rumbos de Integración y Desarrollo Regional – Merendero La Buena Amistad Barrio 2 de Abril – Merendero Latinoamérica, Barrio 8 de Diciembre – Merendero Por un Barrio Digno, Barrio 2 de Abril – Merendero Sonrisas, La Isla Villa Fiorito – MTE –CTEP General Pico, La Pampa – Nodo Cultural Córdoba – PRODEMUR – La Rioja – Promoción de la Mujer Rural – Proyecto Protagonistas de San Miguel – Red Cultura Viva del Este Cordobés – Red Cultural de Chacras de Coria – Red Cultural Perdriel – Centros Angelelli – Red de Fotógrafos – Red de Médicos de Pueblos Fumigados – Red de Solano – Red Nacional de Cultura Comunitaria – Red Sierras Chicas –Fundación Protestante Hora de Obrar – UMEX-Mendoza – Crecer Juntos-Tucumán – Asociación Civil El Amanecer-Formosa

Fuente: Infobae

El sobrepeso y la obesidad en niños y niñas constituyen problemas importantes para la salud pública actual a nivel mundial. América Latina tiene una de las tasas más altas con un 20 y 25% de niños y adolescentes. En Argentina, el sobrepeso y la obesidad en adolescentes de 13 a 15 años aumentó del 24,5% al 28,6% del 2007 al 2012 según la última Encuesta Mundial de Salud Escolar. Por otro lado, la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud (2004-2005) indicó que 10,4% de los niños de 6 meses a 6 años tienen obesidad infantil.

Uno de los factores identificados en el desarrollo de la obesidad infantil es la publicidad de alimentos de bajo valor nutricional que influye en las preferencias alimentarias y en el consumo de los niños y niñas.

Una investigación realizada por FIC Argentina sobre 300 productos (incluyendo cereales, postres y galletitas dulces), que evaluó la calidad nutricional y las técnicas de marketing utilizadas en los envases, reveló que 9 de cada 10 tienen bajo valor nutritivo. La presencia de mensajes de nutrición y de personajes fueron los recursos más detectados en los envases. Se trata de técnicas que influyen en las preferencias alimentarias no sólo de adultos sino también de niños, niñas y adolescentes.

El 87% de los cereales de desayuno, los postres y las galletitas dulces contienen una cantidad excesiva de uno o más nutrientes críticos como sodio, azúcares libres o grasas. Así lo reflejó el análisis sobre 301 productos de estas categorías (209 galletitas dulces, 50 postres y 42 cereales de desayuno) realizado por FIC Argentina, en colaboración con FUNDEPS y la Universidad Católica de Santa Fe.

El estudio fue realizado entre mayo de 2016 y mayo de 2017 con el objetivo de analizar la calidad nutricional de los productos seleccionados y, en paralelo, detectar las técnicas de marketing dirigidas a niños y niñas en los envases de estos productos. En este sentido, la investigación reflejó que 4 de cada 10 envases de cereales, postres y galletitas de baja calidad nutricional utilizan mensajes de nutrición tales como “Fuente de vitaminas y minerales” o “50% de calcio diario recomendado”. Estas frases son incorporadas por la industria de alimentos en el envase para que los consumidores identifiquen a los productos como saludables. Sin embargo, y tal como se observó en el estudio, esa información muchas veces no refleja la calidad nutricional de los productos.

A su vez, la investigación reflejó que 3 de cada 10 de estos productos altos en sodio, grasas o azúcar presentan personajes en sus envases, tanto aquellos creados por la marca como personajes de deportistas y celebridades. También se detectó, en menor medida, la presencia de otras técnicas de marketing como la entrega de regalos, los envases coleccionables, los juegos y los mensajes de salud (“huesos fuertes”, por ejemplo).

“Los resultados del estudio evidencian que la regulación de envases en Argentina no es efectiva para la protección del derecho a la salud, a la alimentación adecuada y a la información de los consumidores. Por el contrario, la normativa vigente del etiquetado habilita a la industria de alimentos a incorporar información que confunde al consumidor y técnicas que buscan atraer a los chicos al consumo de productos no saludables”, declaró Lorena Allemandi, directora del área de políticas de alimentación saludable de FIC Argentina.

Y agregó: “Necesitamos una política que regule de manera efectiva la información que se incluye en los envases de alimentos. Esta política debería contener, por un lado, una regulación del uso de los mensajes nutricionales en los envases de modo que sólo estén presentes en aquellos alimentos que tengan una buena calidad nutricional, especialmente cuando son consumidos por los más chicos. Por otro lado, la medida debería contemplar una restricción al uso de técnicas de marketing dirigidas a niños y niñas. Asimismo, es clave incluir la declaración del contenido de azúcar en los productos que hoy no es obligatoria y contar con un etiquetado que informe de modo simple y claro la calidad nutricional de los productos y no confunda al consumidor”.

Las técnicas de marketing implementadas en los envases, así como la publicidad por otros medios (TV o internet, por ejemplo), influyen en las preferencias de consumo de los niños, niñas y adolescentes e impactan en el desarrollo de la obesidad infantil. Son recursos muy atractivos para los niños y las niñas. Ellos son capaces de identificar y reconocer a los personajes, envases coleccionables y regalos pero aún no tienen la capacidad para identificar que se trata de técnicas que buscan atraerlos al consumo de alimentos de baja calidad nutricional que afectan su salud.

Pese a que el marketing las vende como «fuente de vitaminas», poseen baja calidad nutricional y tienen exceso de componentes críticos como sodio, azúcar y grasas. Especialistas recomiendan reemplazarlas por frutas.

Son atractivas, deliciosas, coloridas y por lo general, siempre pensamos en ellas para acompañar al mate. Argentina es uno de los lugares donde más se consume galletitas. Según un informe de la consultora Kantar worldpanel, de enero de 2017, en nuestro país se consume per cápita siete kilos por año. La frecuencia de consumo de este “alimento” crece en los hogares con niños y adolescentes.

Tanto “amor” nacional por estos bocadillos, hace pensar que si son ricas, no deberían ser malas. Pero un informe reciente mostró el otro lado del placer de consumirlas.

El estudio fue realizado entre mayo de 2016 y el mismo mes de este año, sobre 301 productos entre galletitas dulces, postres y cereales de desayuno. Tuvo como objetivo analizar la calidad nutricional de los productos seleccionados y, en paralelo, detectar las técnicas de marketing en sus envases.

La Fundación Interamericana del Corazón (FIC) Argentina, en colaboración con la Fundación para el Desarrollo de Políticas Sustentables (FUNDEPS) y la Universidad Católica de Santa Fe, llegaron a la conclusión que el 87% de los cereales para desayuno, postres y galletitas dulces contienen una cantidad excesiva de uno o más nutrientes críticos como sodio, azúcares libres o grasas, lo que indica baja calidad nutricional.

Al respecto, la investigación reflejó que 4 de cada 10 envases de cereales, postres y galletitas de baja calidad nutricional utilizan mensajes tales como “Fuente de vitaminas y minerales” o “50% de calcio diario recomendado”. Estas frases, incorporadas por la industria de alimentos para que los consumidores identifiquen a los productos como saludables, muchas veces no refleja su calidad nutricional, según relevó el estudio.A su vez, la investigación reportó que 3 de cada 10 de estos productos altos en sodio, grasas o azúcar, presentan personajes en sus envases, tanto aquellos creados por la marca como los que incluyen deportistas y celebridades.

Cada vez más sodio
Para tener más datos sobre los componentes de las galletitas y snacks, PRIMERA EDICIÓN habló con profesionales del medio local.

Miguel Cristanchi, licenciado en nutrición, comentó que en esos alimentos dirigidos a la población infantil, suele verse en la etiqueta el agregado de hierro y calcio. Son muy importantes para los chicos en desarrollo pero, “a esos productos le sacan el azúcar simple y lo cambian por un tipo de edulcorante. Y no nos fijamos la composición de sodio que tiene el producto. Los especialistas en nutrición vemos que la industria le agrega cada vez más contenido de sodio, y eso también es una complicación para la salud a mediano y largo plazo. La población debería hacer un proceso de educación para leer los etiquetados. La realidad es que nosotros no deberíamos consumir más de dos miligramos de sodio al día. Si uno se pone a mirar las etiquetas, sobrepasan la cantidad de sodio en una sola porción, en casi cualquier producto”.

Sobre las galletitas que se muestran con bajo contenido de sodio o menor colesterol, el especialista opinó que “pueden ser que sean bajas en los tipos de ácidos grasos, tengan adición de Omega 3, u Omega 6, pero tienen agregado de sodio y azucares simples. La situación también puede darse a la inversa en los productos que son para diabéticos, a los que se les quita el azúcar simple, pero para compensar los sabores le agregan alguna mayor cantidad de ácido graso, que hace mal al organismo. Todo queda enmarcado detrás de una estrategia de marketing. Esta es una lucha que encaramos a diario los licenciados en nutrición, no solo con esas estrategias de venta, sino con lo que el Estado mismo permite que se ponga en la etiqueta. En general, la industria alimenticia hace esos juegos, que la población en general no los mira en profundidad. Si leyeran la letra chica de los etiquetados, se van a dar cuenta que es lo bueno o malo que está consumiendo”.

Cristanchi indicó que los padres tienen una gran responsabilidad en este proceso de educación alimenticia, porque los chicos no saben. Son los grandes los que tienen conocimiento y deberían estar alerta sobre lo que ingieren.

“Lo principal es el asesoramiento de especialistas en nutrición, que hay muchos en la provincia, para garantizar una correcta alimentación de la población infantil y la gente en general. Siempre es bueno apuntar a lo natural. Es mucho mejor un jugo de frutas que una gaseosa. Esto no implica que haya una prohibición del consumo de productos industrializados, pero si que la gente busque un equilibrio”.

Comentó también que la alimentación de la población en general es muy mala. “Los últimos estudios del Programa Prosane, y de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dieron que Argentina está con el 25% de su población infantil con sobrepeso u obesidad. Como padres y como Estado, eso nos tiene que llamar la atención, porque a futuro estamos condicionando la salud de los habitantes. Tenemos que moderar los consumos. Saber que podemos comer de todo, pero en ciertas cantidades y momentos”.

El nutricionista recordó que en la provincia existe una ley de quioscos saludables, pero no está reglamentada. “Hace falta una fuerte decisión política, porque la salud infantil no es un juego”, opinó.

En ese sentido, finalmente señaló que hay antecedentes como el de la República Oriental del Uruguay, donde directamente se prohibió la venta de golosinas y gaseosas en las escuelas públicas.

No es lo que parece
Por su parte, Maria Angélica Emategui, presidenta del Colegio de Licenciados en Nutrición de la Provincia de Misiones, señaló que si bien puede observarse en los paquetes la leyenda “fuente de vitaminas y minerales”, esas son en realidad conservantes naturales.

“Por ejemplo, la población en general tiene un exceso de sodio en el organismo. Este elemento está hoy en todos los productos envasados, porque es un conservante natural. Las galletitas dulces tienen sodio. Cuanto más industrializado es, más sodio tiene”.

Por otra parte remarcó que hasta las galletitas saladas tienen azúcar, “por una cuestión de palatabilidad, para que sean ricas”.

Citó además como ejemplo los cereales para el desayuno, que si bien se presentan como saludables, contienen mucha azúcar y sal. “Además tienen muchos colorantes, que a la larga son nocivos”, explicó. “Son perjudiciales porque tiene efectos en enfermedades cardíacas o hipertensión”.

Emategui indicó que el gran consumo de galletitas es algo cultural en Argentina. No se mide el exceso de calorías que poseen. “Dos galletitas con relleno tienen 200 calorías aproximadamente, eso equivale a una manzana. Entonces pensemos que un chico no come una sola, sino que puede comerse un paquete entero de 200 gramos o más. Las consumimos tanto que no se presta atención al valor energético que tienen. Y sí eso va de la mano del sedentarismo, finalmente conduce al sobrepeso y la obesidad”.

En esa línea, opinó que la regulación sobre el etiquetado no es de lo mejor en cuanto a las políticas para disminuir el sobrepeso. “Hay países que tienen etiquetas grandes con exigencias al productor de alimentos de colocar la leyenda ‘con alto contenido de azúcar’. O el uso de la imagen de un semáforo, que advierte sobre cuán saludable es el producto. La recomendación es siempre tener frutas a mano y hacer postres con ellas. Reemplazar los alimentos industrializados con frutas frescas, es lo primordial”.

Indicó finalmente que el argentino y el misionero en general, no come tanta fruta como debiera. “El 45% de la alimentación diaria debe corresponder a frutas, verduras y hortalizas, pero esa es una costumbre difícil de implementarla. La ingesta sana ayuda a prevenir enfermedades, a tener más energía y a sentirse bien”, cerró Emategui.

Fuente: Primera Edición

Colgar información pública en Internet es necesario, pero no suficiente. La Provincia debe acelerar su desarrollo de Gobierno Abierto para favorecer una gestión más confiable. En próximos días podría haber novedades.

Si mañana el ciudadano cordobés ‘Juan Pérez’ decide buscar por Internet cuál es el estado de la licitación de los tramos de gasoductos que faltan construir, chequear la declaración jurada de los funcionarios participantes, conocer si en el historial profesional de esos funcionarios hay cruces con las empresas oferentes o informarse sobre quiénes serán los agentes financiadores… y, posiblemente, Pérez sufra alguna frustración. Nada de esa información hoy está disponible en un portal oficial de la Provincia de Córdoba.

Así como no se informa sobre políticas proyectadas, tampoco hay información relevante sobre lo ya actuado: por ejemplo, sobre cuál fue el destino del financiamiento chino fallido que debía llegar para la misma obra.

Si todo esto es tarea de gobierno, muchos se preguntarán ¿por qué debería colgarse en Internet? Por dos razones fundamentales: los paradigmas de gobernanza han cambiado radicalmente en todo el mundo; adicionalmente, las políticas públicas son cada vez más un tema de la ciudadanía y no sólo de los funcionarios y los políticos.

Desde el 2012, Argentina está adherida a la movida mundial –nacida en el seno de la ONU a iniciativa de EE.UU. y Brasil– llamada «Alianza para el Gobierno Abierto» (AGA). El AGA, que ya tiene 75 países miembros, busca mejorar el desempeño y la calidad de los gobiernos.

Este año, la Dirección de Gobierno Abierto de la Provincia de Córdoba se comprometió a sumar una meta provincial al Plan de Acción Nacional de Argentina ante AGA, durante los años 2017 a 2019. Vale decir: Córdoba ya está formalmente en la jugada. El tema es indagar cuánta decisión efectiva hay de empezar a mover el balón.

De qué hablamos. La transparencia es el primer paso, pero no lo es todo. “El Gobierno Abierto va más allá del mero acceso a la información de la publicación de los datos. Se trata de abrir las puertas del Estado y lograr una relación interactiva con el ciudadano, esperando recibir feedback e inclusive lograr la participación ciudadana en la toma decisiones de política pública que nos afectan directamente”, explica Agustina Palencia, coordinadora del Área de Fortalecimiento Democrático y Calidad Institucional, de la Fundación para el Desarrollo de Políticas Sustentables (Fundeps).

“Nuestra experiencia respecto del gobierno provincial tiene dos frentes –describe Palencia–, por un lado, hemos hecho innumerables pedidos de acceso a información que nunca tuvieron respuesta; por otro, iniciamos este año un contacto con la Dirección que tiene a su cargo Gobierno Abierto”.

En efecto, en el mes de abril, el Gobierno convocó a organizaciones de la sociedad civil para participar en dos mesas de diálogo. Allí se planteó la posibilidad de crear un portal de Gobierno Abierto que iniciará con la información de la Secretaría General de la Gobernación y cuyos primeros avances se conocerían en los próximos días.

“El gobierno advirtió que no podía comprometerse a más porque es necesario un proceso previo de sensibilización en todos los ministerios sobre lo que implica abrir datos”, explicó Palencia. La dinámica viene lenta considerando que la provincia tiene Ley de Acceso a la Información desde 1999 y en 2015 se planteó un proyecto de reforma y actualización.

De un grupo de 10 provincias con sólida presencia digital, Córdoba es una de las tres (las otras son Catamarca y Entre Ríos) que tiene Portal de Transparencia (transparencia.cba.gov.ar) pero no un Portal de Datos Abiertos. Y eso marca toda la diferencia, porque la cultura de Gobierno Abierto no se refiere a dar la posibilidad de “mirar datos”, sino de permitir “participar en la construcción de políticas públicas”. Va más allá del e-government o de los sitios públicos para gestión de trámites.

“El Gobierno Abierto es una respuesta a una coyuntura en la que hay un descontento ciudadano, porque promueve que el Estado deje de ser visto como una caja negra en la que no se sabe qué pasa, y que el ciudadano pueda ser parte de los procesos, del monitoreo y de la toma de decisiones sobre cuestiones que los afectan. Si esta cultura avanza va a cambiar la forma de ver y hacer política”, arriesga Palencia.

Según un estudio elaborado por el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec), para que efectivamente haya Gobierno Abierto, la información generada debe estar disponible como un todo (no fragmentada) y libre de copyright; no debe haber discriminación en términos de esfuerzo, personas o grupos para utilizar, reutilizar y redistribuir la información; los datos deben estar en formatos que permitan su integración a otros datos para facilitar su uso interactivo y, además, deben estar permanentemente actualizados.

A estos criterios básicos de ‘open data’ se agregan otros dos fundamentales: la obligación de los administradores estatales de rendir cuentas sobre las decisiones que toman, y la responsabilidad ciudadana de participar en las decisiones públicas que terminan impactando en su vida.

Qué se hizo bien. Aun cuando Córdoba no ha madurado su modelo de Gobierno Abierto, desarrolló experiencias de transparencia que se deben destacar como pasos previos relevantes. Ellas son:

* Ciudadano Digital (cidi.cba.gov.ar): plataforma que simplifica la relación entre la administración y los ciudadanos. Permite solicitar turnos para trámites, detalla requisitos para realizarlos y pone a disposición del ciudadano la información que el Estado tiene sobre él.

* Transparencia.cba.gov.ar: site que ofrece información sobre ejecución presupuestaria y sueldos de la administración pública.

* Compraspublicas.cba.gov.ar: tiene información referente a subastas electrónicas, el historial de las mismas, montos que fueron asignados y pliegos de contrataciones, entre otros elementos. No ofrece información de rendición de cuentas y lo usa sólo el 45% de las dependencias.

Norma Lezcano

Fuente: Perfil

El 87% de los cereales de desayuno, los postres y las galletitas dulces contienen una cantidad excesiva de uno o más nutrientes críticos como sodio, azúcares libres o grasas. Así lo reflejó un análisis sobre 301 productos de estas categorías (209 galletitas dulces, 50 postres y 42 cereales de desayuno) realizado por FIC Argentina, en colaboración con FUNDEPS y la Universidad Católica de Santa Fe.

El estudio fue realizado entre mayo de 2016 y mayo de 2017 con el objetivo de analizar la calidad nutricional de los productos seleccionados y, en paralelo, detectar las técnicas de marketing dirigidas a niños y niñas en los envases de estos productos.En este sentido, la investigación reflejó que 4 de cada 10 envases de cereales, postres y galletitas de baja calidad nutricional utilizan mensajes de nutrición tales como “Fuente de vitaminas y minerales” o “50% de calcio diario recomendado”.

“Estas frases son incorporadas por la industria de alimentos en el envase para que los consumidores identifiquen a los productos como saludables. Sin embargo, y tal como se observó en el estudio, esa información muchas veces no refleja la calidad nutricional de los productos”, indicó un comunicado de FIC Argentina.

A su vez, la investigación reflejó que 3 de cada 10 de estos productos altos en sodio, grasas o azúcar presentan personajes en sus envases, tanto aquellos creados por la marca como personajes de deportistas y celebridades. También se detectó, en menor medida, la presencia de otras técnicas de marketing como la entrega de regalos, los envases coleccionables, los juegos y los mensajes de salud (“huesos fuertes”, “más energía”, etc.).

Lorena Allemandi, directora del área de políticas de alimentación saludable de FIC Argentina expresó que: “Necesitamos una política que regule de manera efectiva la información que se incluye en los envases de alimentos. Esta política debería contener, por un lado, una regulación del uso de los mensajes nutricionales en los envases de modo que sólo estén presentes en aquellos alimentos que tengan una buena calidad nutricional, especialmente cuando son consumidos por los más chicos. Por otro lado, la medida debería contemplar una restricción al uso de técnicas de marketing dirigidas a niños y niñas. Asimismo, es clave incluir la declaración del contenido de azúcar en los productos que hoy no es obligatoria y contar con un etiquetado que informe de modo simple y claro la calidad nutricional de los productos y no confunda al consumidor”.

Según se detalló en el estudio, las técnicas de marketing implementadas en los envases, así como la publicidad por otros medios (TV o internet, por ejemplo), influyen en las preferencias de consumo de los niños, niñas y adolescentes e impactan en el desarrollo de la obesidad infantil.

En Argentina, el sobrepeso y la obesidad en adolescentes de 13 a 15 años aumentó del 24,5% al 28,6% del 2007 al 2012 según la última Encuesta Mundial de Salud Escolar. Por otro lado, la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud (2004-2005) indicó que 10,4% de los niños de 6 meses a 6 años tienen obesidad infantil.

Tomemos precaución ante el consumo de galletitas, sobre todo en los niños, quienes son los principales consumidores de este alimento de manera cotidiana. Si bien, es difícil distinguir cuáles son las más saludables, la primera recomendación es disminuir el consumo en general de galletitas, dulces y snacks, prefiriendo alimentos más naturales como frutas, postres elaborados con ellas, bizcochuelos y galletitas caseras con productos integrales, frutos secos, semillas, avena, cereales sin azúcar agregada, entre otros.

Lic. Romina Krauss}

Fuente: Misiones Online

Las estrategias de marketing publicitario tienen como propósito destacar las virtudes de un producto o un servicio. Lo habitual –y hasta lo aceptado implícitamente- es que tales estrategias exacerben notoriamente esas cualidades con la intención de que sean cada vez más los consumidores que accedan a tal producto o servicio.

Los excesos habituales en que se suele incurrir en esta tarea han obligado a que el Estado, a través de distintos mecanismos, controle los contenidos publicitarios a los fines de evitar los engaños malintencionados y sancionar a las empresas que cometan transgresiones de esa índole.

Las infracciones son más graves, por cierto, cuando se emiten mensajes distorsionados sobre presuntas cualidades de productos relacionados con la salud de las personas.  Aquellos que se venden como saludables y en realidad no lo son tanto. Detectar este desfasaje entre el mensaje publicitario y la realidad demanda estudios que no siempre se realizan, por lo que el engaño se extiende un tiempo prolongado perjudicando a millones de incautos.

La reflexión viene a cuento de la publicación de un estudio de la Fundación Interamericana del Corazón (FIC) en colaboración con la Fundación para el Desarrollo de Políticas Sustentables (FUNDEPS) y la Universidad Católica de Santa Fe, que reveló que el 87 por ciento de los cereales para desayuno, postres y galletitas dulces, cuyos consumidores habituales son niños, contienen una cantidad excesiva de uno o más nutrientes críticos como sodio, azúcares libres o grasas, lo que indica baja calidad nutricional.

Las etiquetas de una parte de los 301 productos analizados aluden a bondades nutricionales que, en realidad, no tienen, pero que inducen al consumidor a elegirlo.

La investigación reflejó que 4 de cada 10 envases de cereales, postres y galletitas de baja calidad nutricional utilizan mensajes tales como «Fuente de vitaminas y minerales» o «50 por ciento de calcio diario recomendado», pero tales enunciados solo son parcialmente ciertos o directamente falsedades.

El marketing del engaño se completa con la utilización de la imagen de deportistas o celebridades relacionadas con un cuerpo sano. El estudio indica que el 30 por ciento de estos productos altos en sodio, grasas o azúcar “utilizan personajes en sus envases, tanto aquellos creados por la marca como los que incluyen deportistas y celebridades”.

Los especialistas consideran que muchos de los productos que “se venden” como saludables para el desayuno de los niños en realidad son una especie de golosinas, pues poseen abundante azúcar y productos refinados que se esconden detrás del marketing publicitario.

El informe tiene la virtud de revelar estos engaños y alertar a la población, pero también pone al descubierto la carencia de una legislación que regule más eficazmente el contenido de los mensajes en los envases y en las publicidades que se difunden en los medios de comunicación, evitando que empresas vinculadas con la elaboración de productos alimenticios continúen embaucando a los consumidores.

Fuente: El Encasti

Dura realidad arrojó una investigación realizada por FIC Argentina sobre 300 alimentos, para evaluar la calidad nutricional y las técnicas de marketing utilizadas en los envases: casi no existe. La presencia de mensajes de nutrición y de personajes fueron los recursos más detectados en los envases. Se trata de técnicas que influyen en las preferencias alimentarias no sólo de adultos sino también de niños, niñas y adolescentes.

El 87% de los cereales de desayuno, los postres y las galletitas dulces contienen una cantidad excesiva de uno o más nutrientes críticos como sodio, azúcares libres o grasas. Así lo reflejó un análisis sobre 301 productos de estas categorías (209 galletitas dulces, 50 postres y 42 cereales de desayuno) realizado por FIC Argentina, en colaboración con FUNDEPS y la Universidad Católica de Santa Fe.

El estudio fue realizado entre mayo de 2016 y mayo de 2017 con el objetivo de analizar la calidad nutricional de los productos seleccionados y, en paralelo, detectar las técnicas de marketing dirigidas a niños y niñas en los envases de estos productos. En este sentido, la investigación reflejó que 4 de cada 10 envases de cereales, postres y galletitas de baja calidad nutricional utilizan mensajes de nutrición tales como “Fuente de vitaminas y minerales” o “50% de calcio diario recomendado”. Estas frases son incorporadas por la industria de alimentos en el envase para que los consumidores identifiquen a los productos como saludables. Sin embargo, y tal como se observó en el estudio, esa información muchas veces no refleja la calidad nutricional de los productos.

A su vez, la investigación reflejó que 3 de cada 10 de estos productos altos en sodio, grasas o azúcar presentan personajes en sus envases, tanto aquellos creados por la marca como personajes de deportistas y celebridades. También se detectó, en menor medida, la presencia de otras técnicas de marketing como la entrega de regalos, los envases coleccionables, los juegos y los mensajes de salud (“huesos fuertes”, por ejemplo).

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Informe completo de FIC Argentina

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“Los resultados del estudio evidencian que la regulación de envases en Argentina no es efectiva para la protección del derecho a la salud, a la alimentación adecuada y a la información de los consumidores. Por el contrario, la normativa vigente del etiquetado habilita a la industria de alimentos a incorporar información que confunde al consumidor y técnicas que buscan atraer a los chicos al consumo de productos no saludables”, declaró Lorena Allemandi, directora del área de políticas de alimentación saludable de FIC Argentina.

Y agregó: “Necesitamos una política que regule de manera efectiva la información que se incluye en los envases de alimentos. Esta política debería contener, por un lado, una regulación del uso de los mensajes nutricionales en los envases de modo que sólo estén presentes en aquellos alimentos que tengan una buena calidad nutricional, especialmente cuando son consumidos por los más chicos. Por otro lado, la medida debería contemplar una restricción al uso de técnicas de marketing dirigidas a niños y niñas. Asimismo, es clave incluir la declaración del contenido de azúcar en los productos que hoy no es obligatoria y contar con un etiquetado que informe de modo simple y claro la calidad nutricional de los productos y no confunda al consumidor”.

Las técnicas de marketing implementadas en los envases, así como la publicidad por otros medios (TV o internet, por ejemplo), influyen en las preferencias de consumo de los niños, niñas y adolescentes e impactan en el desarrollo de la obesidad infantil. Son recursos muy atractivos para los niños y las niñas. Ellos son capaces de identificar y reconocer a los personajes, envases coleccionables y regalos pero aún no tienen la capacidad para identificar que se trata de técnicas que buscan atraerlos al consumo de alimentos de baja calidad nutricional que afectan su salud.

En Argentina, el sobrepeso y la obesidad en adolescentes de 13 a 15 años aumentó del 24,5% al 28,6% del 2007 al 2012 según la última Encuesta Mundial de Salud Escolar. Por otro lado, la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud (2004-2005) indicó que 10,4% de los niños de 6 meses a 6 años tienen obesidad infantil.

Fuente: Urgente 24